A Veces...

Ayer me preguntaron si creía en el amor. La respuesta fue más que sincera. A veces.

Hay días donde me despierto y pienso que no es más que un invento publicitario para vender películas, chocolates y cualquier cursilería. Pienso que es mentira, y que los que creen estar enamorados… o mucho peor, los que creen amar, no son más que tristes personas que buscan algo tan trivial y mundano como eso para aferrase y tener algo mas por que vivir. Esa constante búsqueda, esa caja de pandora. Esa necesidad de pertenecerle a alguien, esa sensación de tranquilidad, de convivencia. Eso que todos nombran un poco avergonzados. Esa sería más o menos la misma razón porque la peregrinan por las iglesias todos los domingos. Aferrarse a cosas que no existen.

Otros días… otros días quiero creer. Otros días me trato de convencer que eso existe. Esos días son los más complicados. Te juro que son los más complicados. Lucho constantemente con esa ambivalencia de querer y no querer. Esa sensación de amar y odiar lo mismo. De ridiculizarlo y añorarlo con todo mi ser. Esos días estoy más nerviosa que de costumbre. Fumo más que de costumbre y trato de pensar en cualquier cosa. Intento  olvidarme de todo con cualquier sustancia que este cerca. Busco equilibrio. Busco querer o no querer. No puedo estar en el medio. No puedo seguir soñando con algo que hace mucho tiempo espero y no aparece. Esos días me odio y te extraño y me odio mas por no tenerte y darme cuenta de cuantas pelotudeces pienso. Esa necesidad de conocer lo desconocido. Ese miedo de no saber donde mierda estoy parada.

Y están esos días que creo… Eso días donde voy caminando por la calle distraída y el viento me despeina, me hace cosquillas, me hace sonreír, sentirme sonrojada y logra sin querer, que me haga miles de preguntas mientras el corazón me late a mil por hora.

Cierro los ojos y respiro hondo... te respiro a vos. Esos días son los que te espero, los que te sueño, los que quiero que seas real. Son esos días donde sonrió más de lo normal… donde se me nota en la cara, donde la sonrisa es real. Y saludo a desconocidos en la calle. Tengo ganas de bailar… Tengo muchas ganas de vivir.

 Pero a la vez, que triste soñar con vos, que triste que seas solo un sueño y no podamos hacer todas las cosas que planifique para los dos… Pero igual, esos días soy feliz, esos días todo tiene otro perfume, todo me motiva aunque vos no estés. Me dan ganas de amar, esos días me despierto con ganas de querer. Con ganas de quererte. Esos días creo.